sábado, 28 de febrero de 2015

Un toque acondicionador I

A veces un poco de aseo es suficiente, en otras ocasiones se necesita tónico y mascarilla reparadora y hay las que incluso requieren cirugía reconstructiva.
Devolver su buen aspecto a muñecos malparados es para mí un proceso gratificante. Es obvio que, dependiendo de la dificultad que requiera el trabajo y del grado de exigencia propio o de terceros, puede ser hasta abrumador pero disfruto de la transformación y el resultado final siempre lo merece.


 








 BríBrí de Florido estaba sucia, con ojos descolados y faltos de alguna pestaña, desarmada y con gomas inservibles. Limpié, desarmé, reemplacé gomas, monté, rehice maquillaje y añadí pestañas.




Graciosa de Famosa estaba sucia, pálida, con un ojo semiatascado y cejas borradas. Limpié, arreglé ojos, dí color para recuperar el tono original y rehice maquillaje.